¿Qué son los mini mundos?
Los mini mundos son una representación de escenarios (escenas de la vida real o imaginaria) en miniatura. A menudo se representa un tema determinado (granjas, área de construcción, piratas en el mar, mundo de dinosaurios, … lo que sea)
El mini mundo hay que usarlo como un juego diseñado para manipular, no como una maqueta de las de “se mira pero no se toca”.
¿Cuándo puedo ofrecerle a mi hij@ jugar con mini mundos?
Todo depende de su desarrollo personal. Generalmente a un niño de 2 años y medio se le pueden ofrecer mini mundos simples y pueden comenzar a contar sus propias historias. El juego simbólico puede darte mucha información, cuando empieza a usar un palo como si fuese un avión está listo para jugar a mini mundos. Si su interés son los aviones podéis empezar creando un aeropuerto.
Al igual que cualquier otro tipo de juego, los mini mundos promueven un buen desarrollo infantil.
A través del mini mundo, los niños aprenden acerca de la causa y el efecto mientras experimentan y manipulan diferentes objetos.
Conocen el funcionamiento del mundo real. Aprenden que un hospital atiende a los enfermos, una estación de bomberos atiende las emergencias relacionadas con los rescates y los incendios, etc.
Aprenden algunos conceptos relacionados con la naturaleza. Si representamos una granja y el desierto, podrán observar que son ambientes diferentes y que en cada uno hay unos animales característicos.
Los mini mundos son ideales para desarrollar el lenguaje y ampliar vocabulario en un contexto significativo.
Favorecen el razonamiento y la resolución de problemas (“Noooo, todos los animales no pueden comer a vez”). También ayudan a desarrollar la aritmética al ofrecer muchas oportunidades para agrupar o clasificar elementos y contarlos.
Los mini mundos invitan a los niños a ser creativos y aumenta su confianza cuando construyen algo que creen que es increíble.
También es una excelente manera de practicar las habilidades sociales (cuando, por ejemplo, construimos un mini mundo en un aula) donde los niños pueden comunicarse entre ellos y aprender a turnarse, escuchar las ideas de los demás, comprometerse, etc.
¿Cómo represento un mini mundo?
Primero debes elegir el tema que quieres representar. Antes del ello debemos observar los intereses del niño. Una buena apuesta son los animales. ¿Quién no tiene en su casa figuritas de animales salvajes o de granja?. Nosotros hemos apostado por representar la Sabana, ya veréis por qué.
Necesitarás una caja o bandeja de cartón, madera o plástico donde colocar el mini mundo. Intenta que no sea muy pequeña para que el niño tenga espacio por donde recrear su escena. Nosotros hemos usado esta caja de cartón que hemos forrado con un bolsa de basura para que no se estropee tan fácilmente.
Recoge los materiales que vayas a utilizar. Déjate inspirar con un paseo por tu jardín, por el parque o por la caja de juguetes de tu hij@. Seria interesante hacer una excursión al río o a la playa para recoger piedras, conchas, ramitas, etc. A los niños les encanta participar en la creación de mundos pequeños y les gusta buscar artículos que tal vez quieran usar.
Es interesante utilizar elementos del juego sensorial como paja, arena, arroz crudo, rocas, etc. Estos elementos pueden simular diferentes tipos de suelos, comida para los animales, …lo que sea.
Establece la escena. Cuanto más pequeños sean los niños, más simple debe de ser el mini mundo (con un elemento de juego sensorial y diferentes elementos que puedan manipular fácilmente sería suficiente).
Una vez tengas el mini mundo creado, tanto si el niño te ha ayudado como si no, es la hora de presentárselo. Nosotros en eMa lo hemos hecho a través de un cuentacuentos en la sabana, pero puedes hacerlo simplemente poniéndote a jugar y verbalizando lo que está pasando, por ejemplo, si has montado una granja puedes empezar por alimentar a los animales, limpiar los graneros, dejar que el granjero los controle, etc.
Debes usar acciones simples y palabras simples (¡incluso puedes hacer los sonidos de los animales!). Estoy segura de que los niños se unirán bastante pronto y ustedes podrán jugar juntos durante un tiempo. Es bueno tener en cuenta que todos los niños son diferentes. Algunos niños solo necesitan un poco de ayuda para comenzar a jugar solos y otros prefieren no jugar solos o pierden el interés rápidamente. Esto es normal. No te desanimes (¡después de todo el esfuerzo de crear el mini mundo!). Puedes dejarlo a un lado de la habitación durante un par de días y es probable que quieran volver a visitarlo pronto. En general, a medida que el niño crece, su juego evolucionará, se volverá más abstracto (podrá reproducir escenas con las que no está necesariamente familiarizado) y la obra se volverá predominantemente dirigida por los niños.